lunes, 24 de mayo de 2010

Ya tengo casa

El fin de semana de Golden Week, coincidiendo casi con mi primer mes de estancia en Japón, me mudé por fin a un apartamento. Después de pasar las primeras semanas en la residencia Ichinoya por fin podía disfrutar de agua caliente para ducharme por las mañanas, frigorífico y cocina de gas para hacerme mis cenas, lavadora, internet de alta velocidad y demás comodidades de tener una vivienda para mi sólo.



La búsqueda de piso no ha sido fácil y me ha llevado varios fines de semana recorriendo Tsukuba hasta encontrar la zona donde me gustaría vivir, visitando agencias, determinando el precio máximo que estaba dispuesto a pagar por los requisitos que quería, viendo pisos y decidiéndome por uno.



Cuando ya sabía más o menos por qué zona quería vivir, acudí a una agencia y estuve mirando más de diez pisos antes de encontrar el apartamento perfecto. Está situado a dos minutos del International Student Center de la Universidad donde estudio japonés hasta Julio; a diez minutos del laboratorio donde llevaré a cabo mi proyecto de investigación y al lado de una parada de autobús con una línea que en cinco minutos me deja en Tsukuba Center y otra línea que en hora y cuarto me deja en Asakusa y Tokyo Station. Además de estar bien comunicado tiene varios restaurantes y combinis (convenience store) cerca.



El apartamento tiene unos 25 metros cuadrados y está distribuido de la siguiente forma.



A la entrada tiene un pequeño recibidor donde dejar los zapatos. Después hay una cocina, un baño y un WC. La mayor parte del piso la ocupa la habitación principal, de unos 8 tatamis (en Japón las habitaciones se miden así), que es a la vez dormitorio y salón. Este el modelo de apartamento estándar que utilizan los estudiantes en Japón. Ya me hubiera gustado tener un apartamento como el que tenía en Vietnam pero en Japón el espacio está muy limitado y esto es lo que hay.



Tenía muchas ganas de tener cocina de gas para hacerme la cena de vez en cuando. Por el momento estoy disfrutando de la comida japonesa pero algunos días se vuelve algo repetitiva y te apetece hacerte una tortilla o algo más casero.







El baño sigue siendo parecido al de la residencia, un mismo grifo para la ducha y el lavabo pero como dije parece que es lo que se lleva en Japón. La diferencia es que ahora la taza del WC está en un cuarto separado. Sin duda es lo que más mola del piso, la moderna taza de WC con tecnología japonesa. No termino de entender por qué a los japoneses les gusta tener el baño/aseo y el WC en cuartos separados pero definitivamente tener una taza de WC que te calienta el culo en invierno es lo más. Luego tiene un montón de botones y salen chorros de agua, pero todavía no me atrevo a pulsar ninguno. Cuando descubra bien cómo funciona hablaré sobre el tema.





La habitación principal está por ahora bastante vacía, el piso estaba sin amueblar como es costumbre en los pisos de alquiler en Japón. Me tengo que comprar todo, empezando por el colchón que cuesta una pasta, ya que el estilo tradicional japonés es dormir sobre un futón y no me convence demasiado la idea. Con el tiempo iré comprándome los muebles de segunda mano; en un país como este la mayoría de extranjeros están de paso y el mercado de muebles de segunda mano funciona bastante bien.





Por último, el apartamento cuenta con una terraza bastante espaciosa, lo cual es estupendo, las vistas dan a los árboles y al campus de la Universidad de Tsukuba. A la derecha está el edificio donde estudio japonés en el curso intensivo. El edificio alto de la izquierda es el Advanced Research Center, el más alto de la Universidad y donde está situado el laboratorio donde investigaré estos dos años de beca. En fin, al lado de donde hago mi vida el día a día.



Consejos para alquilar un piso en Japón

Durante este tiempo que me ha llevado encontrar apartamento he aprendido algunas cosas que me gustaría compartir por si alguien estuviera interesado en alquilar un piso en Japón.



Cuando se busca piso en Japón lo primero que nos encontraremos en la agencia inmobiliaria (o en su página web) serán hojas y hojas de características de cada piso que tienen disponible, a partir de ahí hay que elegir cuales nos interesa visitar. Por tanto, además de la zona donde a uno le gustaría vivir, desde el primer momento también es importante tener varias cosas claras porque la cantidad de pisos que tenemos para elegir suele ser abrumadora. En la siguiente tabla he marcado los puntos importantes a tener en cuenta a la hora de buscar piso en Japón:



1. Tipo de vivienda: アパート (Apaato) o マンション (Mansion). Apaato era el tipo de vivienda típico en Japón hasta hace unos años. Se trata de bloques de viviendas generalmente de pocos pisos, con las paredes poco aisladas, lo que repercute no solamente en el ruido de los vecinos sino en el frío y en la humedad que se cuela en casa. Mansion es el tipo de vivienda más moderno y que se está extendiendo cada vez más en Japón. Son edificios de apartamentos de varias plantas de altura de estilo más occidental, lo que en inglés de denomina Condominium. El precio varía bastante entre un tipo de vivienda y el otro, casi el doble, pero hay que tener en cuenta que el clima en Japón es bastante húmedo y en invierno hace mucho frío. En Tsukuba, al igual que en Tokio, casi todos los occidentales viven en apartamentos tipo Mansion.

2. Precio de la vivienda: suele tener un mínimo y un máximo, el mínimo es para los apartamentos situados en la planta baja y el máximo para los apartamentos situados en la planta más alta. Dependiendo del número de plantas del edificio el precio oscilará más o menos y aunque parezca una tontería hay bastante diferencia entre vivir en una planta u otra aparte de las vistas. Como he comentado, en Japón el clima es bastante húmedo y eso se sufre más en las plantas bajas.

3. Gastos de comunidad: suelen variar dependiendo de si el edificio tiene o no ascensor.

4. Parking: para coches únicamente. Para bicis y motos todos los edificios suelen tener un aparcamiento privado gratuito.

5. Shikikin (Depósito o fianza), suelen ser dos mensualidades. Se devuelve al final del contrato descontando los gastos de limpieza del piso.

6. Reikin (Honorarios), suele ser una mensualidad. Es un dinero de gratitud que se entrega al propietario del apartamento. Algunos caseros no la exigen y es dinero que se ahorra el inquilino.

7. Chukaitesuryo (Comisión), suele ser una mensualidad. Es el dinero que se lleva la agencia inmobiliaria por gestionar el alquiler del piso. Algunas agencias permiten negociar esta cantidad y es dinero que se ahorra el inquilino.

8. Tasa de renovación del contrato de alquiler tras su vencimiento, suele ser una mensualidad.

9. Periodo de contrato, lo habitual son dos años.

Como se puede ver, para alquilar un apartamento en Japón en teoría se necesita como mínimo pagar por adelantado 5 mensualidades: 2 x Fianza + Honorarios + Comisión + Mensualidad del primer mes. Una pasta. Algunos españoles en Japón, como Alain, ya han hablado sobre el tema de los pagos de entrada que se necesitan para alquilar un piso, pero me gustaría arrojar un rayo de esperanza: todo es negociable con la agencia. La mensualidad, los meses de depósito, los honorarios, la comisión de la agencia, incluso que el piso esté amueblado cuando entres a vivir; o al menos esta ha sido mi experiencia en Tsukuba.

- Negociando con el propietario acordamos que no pagaría los honorarios si prometía quedarme más de medio año en el piso (les dije que después de todo el papeleo que me había llevado no quería volver a saber nada de buscar piso hasta un año por lo menos).
- Negociando con la agencia acordamos que no pagaría la comisión a cambio de hacer publicidad a otros estudiantes internacionales (y por supuesto no he tardado en recomendar esta agencia a mis compañeros).
- La agencia me ayudó a conseguir los electrodomésticos que necesitaba de segunda mano por mucho menos de lo que me hubiera costado conseguirlos por separado en una tienda. Así, cuando entré a vivir al piso ya tenía nevera, lavadora y cocina de gas. Como ya he comentado, los pisos en Japón se alquilan vacíos así que ni siquiera puedes cocinar.

Por último, si el desembolso inicial no era ya lo suficientemente considerable resulta que en Japón a los extranjeros que alquilan piso se les exige un Hoshonin (Garante), es decir, una persona o una empresa japonesa que les avale y responda en caso de impago. Lo habitual es utilizar los servicios de una agencia Hoshonin-gaisya que se encarga de avalarte a cambio de una comisión de una mensualidad del alquiler. ¡Suma y sigue! En este aspecto de nuevo he tenido suerte ya que mi Universidad está suscrita a un programa de seguros de alquiler para estudiantes extranjeros en Japón y por sólo ¥9000 la Universidad me avala durante los dos años que dura mi contrato de alquiler.

Ahora sólo queda comprar los muebles y empezar a disfrutar del apartamento... ¡y de Japón!

7 comentarios :

zordor dijo...

Me quito el sombrero Alberto, has conseguido hacer una entrada amena, super informativa y sin enrrollarte, directamente al grano.

No es por peloteo, pero soy super fan de este blog desde ya :)

ah y genial la casita... se parece un poco a la mia... dame envidía cuanto pagas tu ahí? seguro que menos de la mitad que yo :P Y por último el futón parece peor de lo que es yo estoy encantado ;)

Alberto dijo...

Gracias tío. A mi también me encanta tu blog, era uno de los que leía con más interés antes de venir a Japón para ver cómo iba a ser empezar una nueva vida y ser estudiante de japonés. :-)

Vivo estupendamente en este apartamento. Se me fue un poco el presupuesto pero he hecho mis cuentas y me da para pagarlo. Me cuesta ¥56.000 con internet de 100 Mbps incluido. Para Tokio puede no ser muy caro, pero en Tsukuba casi todos los estudiantes extranjeros suelen pagar entre ¥30.000 y ¥50.000.

Si vienes algún día por Tsukuba a ver el monte o los cobetes de la JAXA te invito a unas Asahis en la terraza ;-)

Juleo dijo...

Me alegra verte(leerte) asentado ya Alberto! A ver si Kuala se anima y nos vamos a verte, estando allí dos años sería pecado no hacerlo!

Un abrazote ;)

Alberto dijo...

Juleo, que ilusión me haría que Juan y tú volviérais por Asia pronto para liarla juntos. Seguro que después del viaje que os marcásteis cuando Juan acabó la beca ganas no te faltan. ;-)

Un abrazo.

zordor dijo...

Me halaga que te guste mi blog :) y si para Tokyo 56mil yenes es un regalo, por eso aquí solo consigues un agujero inmundo en porculio :)

Te tomo la palabra y un día me paso a por las asahis y a que me enseñes el campus :)

Gladys dijo...

Hola Alberto, leí tu coment ya que en un mes me iré a vivir a Tsukuba y estaré allá por un año y medio, esto me tiene un poco dudosa en cuanto a en donde voy a vivir por todo este tiempo, no se si sigas por allá, pero espero que puedas ayudarme, soy de México y me voy becada a realizar estudios, te dejo mi correo por si puedes ayudarme, mil gracias!!!

Gladys (gladys1009@yahoo.com)

Alberto dijo...

Hola Gladys,

No te preocupes que en Japón nunca dejan las cosas sin atar. La organización que te haya concedido la beca te garantizará alojamiento a tu llegada, claro que si no te gusta siempre te puedes cambiar después de llevar un tiempo aquí pero está bien tener una habitación para las primeras semanas. Si vienes con una beca Monbukagakusho, por ejemplo, te meterán en una residencia de estudiantes de la Universidad de Tsukuba. Yo pasé ahí el primer mes y luego me cambié a un piso para estar más cómodo. Pero está bien llegar y no tener que preocuparte por el alojamiento, hay cosas más importantes.

Contacta con la organización que te ha concedido la beca y pregúntales por el alojamiento. También puedes contactar con el International Student Center de la Universidad y preguntarles a ellos. Si vas a ser estudiante de la Universidad de Tsukuba tienes derecho a vivir en las residencias de estudiantes.

Nos vemos por aquí.

Saludos.