lunes, 26 de mayo de 2008

Con el casco a todas partes

Hay una máxima que puede aplicarse muchas veces a los vietnamitas: Nunca hay término medio, o no llegan o se pasan.

Antes de que se aprobara la polémica Ley del Casco en Diciembre del pasado año nadie llevaba casco en Vietnam, ni el tato.


Encuentra la persona con casco... sólo hay una.

Incluso en los días anteriores inmediatos a la fecha límite la gente seguía sin ponerse el casco, apurando hasta el último día.



Fue entrar la Ley en vigor y ese día ¡todo el mundo llevaba casco!



Para aplicar la Ley con fuerza, se movilizaron policías en todas las esquinas que multaban a los pocos infractores, seguramente despistados. Según las noticias de prensa el balance fue muy positivo, más del 90% de la gente llevaba casco.

Del hecho de que todos los vietnamitas pasaran a usar casco de un día para otro se puede deducir que concienciar no se concienciaron mucho, pero respeto a la Ley (y a los policías) sí que tienen.

Medio año después, la gente utiliza el casco con normalidad y rara vez ves a alguien sin casco sino es para ir de acá para allá sin salir del barrio.

El caso es que de un tiempo a esta parte he notado que el casco de la moto ha pasado a ser un complemento más para los vietnamitas y su uso no resulta incómodo.

Se lo ponen encima de sombreros y gorras...



Los venden con forma de gorra, para ir a la moda. Aunque no estoy muy seguro de que estos cascos sean reglamentarios en un país occidental...


Ya expliqué también en su día porqué van siempre tan tapadas las vietnamitas...

¡Y algunos no se quitan el casco al bajar de la moto! que es lo que más me sorprende...

Es normal ver por la calle a gente caminando con él puesto.



Incluso cuando van al mercado o a las tiendas.





Y lo siguiente ya es de risa... ¡Son capaces de llevarlo consigo en un avión y ponérselo dentro! Es para decir... pero ¿qué cojones?





Los vietnamitas no dejan de sorprenderme cada día más con comportamientos tan extraños. En un intento por sumergirte en su cultura, puedes llegar a comprender que aquí todo el mundo tiene moto y la utilizan para ir a cualquier parte (¡pasan más tiempo en moto que caminando!). El casco ha pasado a ser algo habitual en sus vidas y se han acostumbrado tanto a llevarlo puesto que no les incomoda y ni lo notan... También decir que es muy común que la gente se lleve el casco de viaje dentro de Vietnam, ya que allí donde vayan seguramente acabarán montados en una moto (sea alquilada, de un familiar, etc) y necesitan casco. El casco se convierte en algo personal e intransferible... pero ¿es necesario ponérselo dentro de un avión?, ¡eso ya no se lo explica nadie!

Creo que alguno se ha tomado demasiado en serio este anuncio de promoción del uso del casco por la entrada en vigor de la Ley. xDDDD



En fin, de los vietnamitas te puedes esperar cualquier cosa. El uso del casco es sólo una de muchas... tengo historias para aburrir. Ya las iré contando... :)

lunes, 19 de mayo de 2008

Los Metros en Asia

Después de haber viajado en los Metros de algunas ciudades de Asia, hay un par de cosas que me han llamado la atención.







En primer lugar, la existencia de mamparas de seguridad de cristal.



El Metro de Singapur (MRT) fue el primero en incorporar estas puertas de protección en los andenes en 1987. La primera idea que te viene a la cabeza es la prevención de accidentes, de caídas a la vía de forma involuntaria. Sin embargo, la triste realidad es que también sirven para prevenir suicidios, algo común en ciudades como Tokio, por ejemplo.



Las puertas de protección no suponen ningún engorro porque se abren a la vez que las puertas del vagón, pero en 2007 ocurrió un accidente en el Metro de Shanghai cuando un hombre quedó atrapado entre las dos puertas.

Me sorprendió la tremenda precisión con la que los trenes se detienen en la estación y hacen coincidir puerta con puerta. Recuerdo veces en las que el Metro de Madrid (uno de los mejores del mundo supuestamente) se detenía y volvía a arrancar para adelantarse o incluso retroceder varios metros. Supongo que esto dependerá del nivel de automatización del sistema de conducción del tren pero parecía como que al señor conductor se le hubiera ido la mano con el freno... :D


Qué diferencia con el Metro de Madrid, (vuela)

Además de las mamparas de seguridad, en segundo lugar me han llamado la atención las marcas en el suelo para educar a los viajeros.

Estoy hablando del clásico Dejen salir antes de entrar pero en versión gráfica para que los chinos, algo maleducados por excelencia, lo entiendan fácilmente y sean considerados. En el Metro de Pekín la avalancha humana fue tal que Ana y yo acabamos metidos en vagones separados, ¡no son civilizados!



En el Metro de Hong Kong son muy gráficos: los que salen por el centro tienen prioridad frente a los que entran, que deben situarse a los lados. Más claro imposible.



En el Skytrain (metro elevado) de Bangkok también están...







En Singapur vimos que pintan marcas en el suelo para indicar a la gente dónde debe situarse.





Y en Taipei aprendimos incluso que ¡se puede hacer cola para entrar en los vagones! 0_0



En Europa estas cosas parecen ridículas pero en Asia toda campaña en favor de la educación de los chinos no está de más...


Para acabar, típica foto "Voy sobao..." en el Metro

miércoles, 14 de mayo de 2008

Progresando adecuadamente en vietnamita

Después de 6 meses aprendiendo vietnamita puedo comentar algunas curiosidades del idioma que me han llamado la atención durante este tiempo.

Los pronombres personales dependen de la situación

En vietnamita, las formas clásicas del yo, tú, él, nosotros, vosotros, ellos, dependen de tu posición respecto al oyente. Así, no resulta igual dirigirte a un anciano, a tu padre o a un niño.

1ª persona del singular:
· Tôi, pero que sólo se usa en situaciones formales donde no se conoce a la otra persona

1ª persona del plural:
· Chung ta: para referirse a nosotros incluyendo al oyente
· Chung tôi: para referirse a nosotros excluyendo al oyente

2ª persona del singular:
· Ông: para referirse a un hombre casado mucho más mayor que tú
· Anh: para referirse a un hombre casado o soltero algo más mayor que tú
· : para referirse a una mujer casada mucho más mayor que tú
· : para referirse a una mujer soltera mucho más mayor que tú o a una profesora
· Chị: para referirse a una mujer soltera o casada algo más mayor que tú
· Em: para referirse a un chico o chica más pequeño que tú
· Cháu: para referirse a un niño pequeño

¿Cómo saber si una mujer está casada o soltera? Ahí está la gracia...

2ª persona del plural:
Igual que en la forma singular pero anteponiendo Các, por ejemplo, Các Anh para referirse a vosotros, hombres algo más mayores que yo. Si hay variedad, se ponen todos los pronombres, por ejemplo, Các Anh Chị para referirse a vosotros, hombres y mujeres algo más mayores que yo.

3ª persona del singular:
Igual que la 2ª persona pero posponiendo ấy, por ejemplo, Anh ấy para referirse a él, hombre algo más mayor que yo.

3ª persona del plural:
Se antepone Các y se pospone ấy al pronombre, por ejemplo, Các Anh ấy para referirse a ellos, hombres algo más mayores que yo.

En formas coloquiales, para referirte a la 1ª persona del singular, yo, en lugar de Tôi se utiliza el pronombre de la 2ª persona del singular dependiendo de tu situación respecto al oyente. Por ejemplo, si hablas con alguien más mayor, utilizarás Em para referirte a ti y si hablas con alguien más joven, utilizarás Anh para referirte a ti.

Un ejemplo completo: Anh yeu Em significa Yo (hombre más mayor que tú) te quiero a ti (mujer más joven que yo).

No existen formas verbales

Al igual que en otras lenguas asiáticas, en vietnamita no existen desinencias de un verbo para expresar tiempo, modo, número y persona. El verbo permanece invariable. Se habla "como los indios": Yo comer arroz

En formas personales, se aplica el verbo para cualquier persona y listo:

Tôi ăn cơm (Yo como arroz)
Em ăn cơm (Tú comes arroz)
Chung tôi ăn cơm (Nosotros comemos arroz)

En tiempos verbales, se aplica un adverbio de tiempo y listo:

Presente: Tôi ăn cơm (Yo como arroz)
Presente continuo: Tôi đang ăn cơm (Yo estoy comiendo arroz)
Pasado: Tôi đa ăn cơm (Yo comí arroz)
Futuro: Tôi sẽ ăn cơm (Yo comeré arroz)

Fácil y sencillo en vietnamita, el castellano es una de las lenguas más complejas del mundo en cuando a conjugaciones verbales, ya que existen accidentes gramaticales para tiempo, modo, número y persona. Esta gente se apaña con dos adverbios de tiempo y se entienden, ¿seremos los españoles los enrevesados en este aspecto?

El vocabulario es bastante intuitivo

Dado que el vietnamita es un lenguaje monosilábico, todas las palabras se basan en una sílaba o la unión de varias. Cada sílaba puede ser una palabra y significar un concepto, así que la unión de varias sílabas puede formar una palabra de significado más complejo.

Esto se ve mejor con un ejemplo:

· Nước significa agua
· Nước suối (Agua Fuente) significa agua mineral
· Nước cam (Agua Naranja) significa zumo de naranja
· Nước chanh (Agua Limón) significa zumo de limón
· Nước chè (Agua Hoja del Té) significa té
· Nước mắm (Agua Pez en salmuera) da nombre a una salsa típica en Vietnam del Sur
· Nước tương significa salsa de soja
· Nước giải khát (Agua Calma Sed) es lo que pone en las latas de Coca Cola ;)

Otro ejemplo:

· Xe significa vehículo
· Xe ô tô (Vehículo Auto, calco fonético del vocablo francés) significa coche
· Xe buýt significa autobús
· Xe lửa (Vehículo Fuego) significa tren (se acuñó este término en tiempos de los trenes de vapor)
· Xe mô tô significa moto, aunque es más común utilizar Xe máy (Vehículo Máquina/Motor)
· Xe đạp (Vehículo Pedalear) significa bici
· Xe ôm (Vehículo Abrazo) se llama a los taxistas de motos, que te llevan de paquete detrás.
· Giữ Xe (Guardar Vehículo) significa parking

Algunos aspectos, como la pronunciación, con sus 12 vocales x sus 6 tonos = 72 sonidos, o el empleo de los pronombres personales son más complicados en la lengua vietnamita pero la gramática es mucho más sencilla que el español. Tantas diferencias entre ambos lenguajes hace que aprender sea todo un reto y una experiencia.

El único problema con el que me enfrento es encontrar alguien con quien practicar. Los vietnamitas que hablan o están aprendiendo inglés te piden que les hables en inglés para así poder practicar ellos. Al final, para beneficio mutuo, acaba siendo una conversación entremezclada a ratos en vietnamita a ratos en inglés. Este interés por aprender inglés hace que mucha gente en Vietnam lo hable, aunque sea a un nivel muy básico. Te hace mirar a España y ver que, a pesar de ser un país donde la enseñanza es de calidad, somos más analfabetos en lengua inglesa que un país como Vietnam. Con esa actitud los españoles no conseguiremos quitarnos la boina a nivel internacional...

jueves, 8 de mayo de 2008

Tioman

Tras pasar por Kuala Lumpur y quemar el día y la noche en la capital daban comienzo las auténticas vacaciones. Vinimos a Malasia buscando el descanso, la paz y la tranquilidad de sus islas, las aguas cálidas y cristalinas que bañan sus playas. Es por ello que la segunda etapa de la Quedada de Informáticos ICEX de Asia-Pacífico transcurrió en Tioman, una isla al sudeste de Malasia.





Tioman es un auténtica isla paradisíaca.



Sólo algunas zonas de la costa están urbanizadas por muelles y resorts, el interior de la isla se conserva virgen, pura selva. No existen las carreteras y la única forma de moverse de un punto a otro de la isla es en barca. Es por ello que organizamos una excursión en barco alrededor de Tiomán que nos llevó todo un día.

Empezamos visitando una de las muchas playas de arena fina desiertas, ¡qué paz!



Fue el momento para echarnos unas fotos y celebrar la vida como becarios ICEX.


Yo con Peque, destinado en Pekín


Asistentes a la quedada: Sidney, Kuala Lumpur, Manila, Sofía, Jakarta, Singapur, Pekín, Hong Kong y Ho Chi Minh City.

Después de pasar un rato tranquilo en la playa, algo de aventura. Nos llevaron a ver una cascada de agua dulce en el interior de la isla.


Momento Lost

La cascada era de película. Agua pura y fresca salida de un manantial. Arriesgamos un poco ascendiendo por las resbaladizas rocas pero mereció la pena llegar hasta arriba y dejar que el salto de agua te diera un masaje en la espalda.



Continuamos el viaje alrededor de la isla y descubrimos una posible inspiración de las Torres Petronas de Kuala Lumpur.



Para terminar la excursión, esnórquel.

Lo mejor de Tioman es el mar transparente de color turquesa, impresionante. Es uno de los mejores lugares del mundo para bucear, sin duda.



Estuvimos nadando una hora larga, bajando para ver de cerca el coral.



Y rodeados de pececillos mientras les dábamos de comer pan bimbo. Hasta vimos peces payaso entre anémonas.



Fue una experiencia divertida. Era la primera vez en mi vida que hacía esnórquel y me lo pasé como un enano. No puedo esperar a sacarme la certificación PADI de buceo y hacer inmersiones, como están haciendo la mayoría de mis compañeros becarios del sudeste asiático.

El final del día fue mágico. Volvimos a nuestra playa y nos quedamos chapoteando en la orilla con unas cervezas contemplando la puesta de sol, momento que se me quedará grabado para siempre.





La quedada fue un éxito. A menos de medio año para acabar la beca, tuvimos tiempo de compartir nuestras experiencias estos meses en nuestros destinos, nuestros viajes por el mundo y nuestras perspectivas de futuro de quedarnos por Asia o volver a España cuando acabe la beca. La verdad es que todos mis compañeros son gente de puta madre, buenos amigos que cuando nos juntamos lo pasamos en grande.

No quisiera empañar el viaje detallando el infierno que sufrimos hasta llegar a Tiomán pero el organizador, Juan, no puede quedar impune después de haberme hecho pasar la peor travesía de mi vida, en serio. Por suerte, la estancia en Tiomán fue tan maravillosa que lo compensa todo. Mil gracias por llevarnos allí, estamos en paz. xD

Después de este viaje, no puedo dejar de pensar en la próxima escapada a Bangkok en Junio con mis compañeros.

martes, 6 de mayo de 2008

Kuala Lumpur

Ya he vuelto de mi viaje a Malasia con motivo de la Quedada de Informáticos ICEX de Asia-Pacífico, con nombre en clave Operación Malaya.

Los Informáticos asistentes a la Quedada fuimos 9:

- Peque desde Pekín
- Javi desde Hong Kong
- Pura desde Manila
- Yo desde Ho Chi Minh City
- Juan desde Kuala Lumpur
- Mike desde Singapur
- Fausy desde Jakarta
- Juanjo desde Sidney
- Leti desde ¡la lejana Bulgaria!

La mitad del viaje hemos permanecido en Kuala Lumpur, K.L., la capital de Malasia y hogar de las famosas Torres Petronas.



Al llegar me encontré una ciudad más moderna y desarrollada de lo que Juan me había contado. Otra vez la sensación de que Saigón es el tercer mundo.



Lo que más me llamó la atención de Malasia es el carácter islámico de la nación y la mezcla de etnias: 55% de origen malayo, 25% de origen chino y 10% de origen hindú, cada uno profesa una religión: islamismo sunita, budismo y taoísmo e hinduismo, respectivamente.

El sistema de gobierno, basado en partidos políticos divididos según etnias y religiones, se define como una democracia parlamentaria, pero en realidad Malasia carece de las mismas libertades que las democracias occidentales. El Islam, introducido en Malasia en el s.XIV e impuesto por la mayoría malaya, rige la vida del país como religión oficial.



La mayoría de los edificios oficiales luce una arquitectura de estilo islámico y abundan las mezquitas, además existen restricciones para la construcción de templos religiosos no islámicos. Así mismo, los malayos son declarados musulmanes de nacimiento y en su documento de identidad se ve así reflejado, impidiendo que puedan acceder a actividades no vistas con buenos ojos por la fe del Islam, como comprar bebidas alcohólicas, por ejemplo. Apostatar (borrarse de la religión islámica) no es nada fácil y, siendo una población de etnias entremezcladas, cualquier no musulmán que quiera contraer matrimonio con un musulmán debe renunciar a su religión y convertirse al Islam.


Las mujeres malayas, casi todas con velo y poco atractivo. La expresión Cayo Malayo no es ningún mito. xD

Al igual que su vecina Singapur, todas las etnias conviven pacíficamente y han conseguido sacar adelante un país moderno, con ciudades tecnológicas y su propia industria automovilística, por ejemplo.



Para visitar la ciudad, Juan, muy amablemente, nos recomendó una ruta que recorría los principales barrios del Centro.



Empezamos por China Town



Llegamos al Centro Histórico, donde se fundó Kuala Lumpur (en malayo, Confluencia Fangosa) en 1857.



Merdeka Square, la Plaza de la Independencia.



La visita continúa por Little India, nada auténtica comparada con la de Singapur, que te transporta a un típico barrio de la India de verdad.



Desde ahí ya se alcanza a ver Menara KL, la torre de comunicaciones de Kuala Lumpur.



Desde lo alto del mirador se puede divisar toda la ciudad.



Incluyendo las Torres Petronas, actualmente el 4º rascacielos más alto del mundo, se dice pronto.



Las torres están basadas en un diseño geométrico presente en el arte islámico, la estrella de 12 picos con un círculo en cada intersección, haciendo honor a la herencia musulmana de Malasia.



Si ya por el día impresionan, por la noche iluminadas sobrecogen.



Parecen dos joyas preciosas en mitad de Kuala Lumpur.



Con este decorado de fondo, fue inevitable no acabar posando...



Por supuesto, también todos juntos en una foto de familia de los asistentes a la Quedada.



Ya de noche, salir de fiesta por Kuala Lumpur resultó igual de frustrante que en Saigón, todos los garitos cierran a las 3, y es casi peor, ya que las copas cuestan una pasta porque el alcohol se considera un lujo en un país islámico. Aún así, el sábado salimos por el Zouk, una discoteca bastante guapa junto a las Petronas, hacía tiempo que no bailaba tanto y me lo pasaba tan bien de marcha.



Esa noche, otros dos clubs me llamaron la atención: En uno pedían cuello para entrar, es decir, camisa o polo, nada de camiseta. Fue la primera discoteca que encontraba en Asia con normas de vestimenta para entrar, como en España. El otro era el Yahoo, un garito metido en un garaje subterráneo al que llegabas, te abrían la verja, pasabas y la echaban abajo, supongo que con intenciones muy claras de mantenerse escondidos. Era un after, lo único abierto después de las 3 y donde acababan los restos de la noche de Kuala Lumpur, música bakala a tope, totalmente a oscuras y lleno de chinos puestísimos.

Me gustó bastante Kuala Lumpur, una ciudad más moderna de lo que esperaba. Puedes acabar un poco rayado de la cultura islámica y la parsimonia de los malayos, pero no deja de ser un lugar más occidental que Saigón. Aunque parezca un tópico, encontré K.L. un término medio entre Bangkok y Singapur. :P

Selamat Jalan!