Feliz Navidad, Singapur

Del 22 al 25 de Diciembre he estado en Singapur celebrando las Navidades con otros compañeros becarios de Informática.



Nos juntamos Mike (Singapur), Juan (Kuala Lumpur), Sergio (El Cairo) y Roberto (Trípoli).


De izqda. a dcha., Cairo, Singapur, Trípoli, Kuala y Ho Chi Minh City.

Mike sirvió excelentemente de anfitrión y nos alojó en su piso, con unas vistas estupendas al skyline de Singapur.



Según llegué tuvimos una barbacoa patrocinada por los padres de Sergio y dirigida por Dani, un argentino afincado en Singapur. Filetaco de ternera bien especiado, morcillas y chorizos, ¡todo de España! ¡Y tras haber pasado la aduana de Egipto y de Singapur! Después de la cena hicimos botellón y nos fuimos a Clarke Quay, zona de marcha.



Al día siguiente visitamos China Town.



Por la tarde-noche nos dirigimos a Sentosa, una isla al sur de Singapur en la que ya había estado con motivo del Zoukout 2007. Estuvimos en Café del Mar y en Km 8, disfrutando de cócteles, cubos de cervezas Tiger y música House de fondo. ¡Qué buen rollo!





Se nos pasó el tiempo volando y tuvimos que volver a Singapur para ver el clásico Madrid-Barça, que lo echaban a las 3 de la mañana. Por suerte encontramos un bar en St. James Power Station donde podíamos ver la primera parte. Luego lo cerraban así que tuvimos que movernos a la discoteca Dragon Fly para ver la segunda parte en la zona de karaoke. Mike, que llevaba chanclas, no podía entrar, tuvimos que lanzarle unas zapatillas desde una ventana de la discoteca, esquivando cámaras y seguratas. Fue muy divertido ver el partido mientras de fondo teníamos a los chinos cantando canciones románticas en el karaoke. Después nos quedamos viendo un concierto en directo de pop-rock chino también muy interesante hasta que cerraron el club.

Al día siguiente visitamos Little India y al Sim Lim, el centro comercial de electrónica más conocido de Singapur. Un edificio entero de 6 plantas llenas de tiendas de cámaras de fotos, teléfonos móviles, videojuegos y ordenadores. Puedes perder toda una tarde y todo tu dinero ahí, comparando precios de una tienda a otra y regateando con los vendedores. Yo pasé cerca de una hora para comprar algo que ya sabía que quería, un RAZR. El Sim Lim es uno de los mejores sitios de Asia para comprar electrónica, sale bastante más barato que en España.

Tras las compras de Navidad, ¡a preparar la cena de Nochebuena! Decidimos hacer cena en casa de Mike. Nos dividimos para comprar comida occidental por Singapur, vaya odisea. Roberto y yo nos encargábamos de los pollos. Habíamos visto un puesto en el distrito financiero, Raffles Place, con pollos colgados. Nos acercamos y le pedimos 3 pollos. Al rato, vemos que el tipo había cortado 2 pollos en tiras, las había puesto encima de un tapper de arroz y estaba echando salsa: Chicken Rice estilo chino. Le digo al señor que queremos los 3 pollos enteros, nada de cortar en tiras. Por si acaso, nos quedamos viendo lo que hace... Coge otro pollo, empieza a quitar la piel, los muslos, ... le digo, "¡Para! Queremos 3 pollos enteros, sin cuello, cortados por la mitad, con piel, muslos y todo lo que lleva un pollo menos la cabeza. Ponga cada mitad en un tapper y ¡listo!" Al señor le costó entenderlo, "¿pollo sin cortar en tiras, sin arroz y sin salsa? Pues sí..."


¡Lo que nos costó conseguir los pollos!

Más o menos tuvimos la misma odisea para conseguir el pan para hacer tostas con jamón y aceite. Al final volvimos a casa, juntamos la comida, acompañamos todo con una ensalada y patatas. Descubrí lo divertido que es freir patatas en un fogón sin extractor junto a la ventana de un piso 14 de un rascacielos.

Por fin pudimos disfrutar de la cena de Nochebuena. Al final, acabamos comiendo Chicken Rice, pero estilo español. Lo mejor de la cena, el jamón serrano y el vino Rioja que había traido Sergio, un lujo.


Cena de Nochebuena lejos de nuestras familias, pero en buena compañía.

Tras la cena, a liarla. Nos fuimos a Clarke Quay, unas copas y al Ministry of Sound. Cuando cerraron, nos movimos a una zona de afters cerca de Elgin Bridge.





Al día siguiente, día de Navidad, tenía que coger mi vuelo de vuelta a Ho Chi Minh City. Llegamos a casa de fiesta a las 9 am, tenía 1 hora para dormir antes de salir para el aeropuerto. Por no quedarme de empalmada, en lugar de 1 hora me dormí 2 y perdí el vuelo. Llegué a falta de 20 minutos para que saliera el avión y habían cerrado el check-in. Tuve que comprar un billete para el día siguiente y volver a casa con todo el bajón. Al menos aproveché el día para salir a cenar por la noche y conocer Lau Pa Sat.


Vistas desde un bar terraza, qué bonita ciudad.

El 26 por fin llegué a Ho Chi Minh City por la mañana temprano, justo a tiempo para entrar a trabajar en la Oficina.